La Mañana de Asencio, óleo de Carlos María Herrera
El Grito de Asencio o la Admirable Alarma1 fue la decisión tomada por criollos de la Banda Oriental el 28 de febrero de 1811 a orillas del arroyo Asencio, de emprender las primeras acciones revolucionarias contra las autoridades realistas españolas de Montevideo,2 adhiriendo a la Junta de Buenos Aires.
Grito de Asencio (detalle).Jorge Calasso Óleo sobre tela, 1962.
NOTA
Criollo es un americanismo que se empleó desde la época de la colonización de América aplicándolo a los nacidos en el continente americano, pero con un origen europeo. A diferencia del indígena, el criollo (del portugués crioulo, y éste de criar) era un habitante nacido en América de padres europeos (usualmente españoles), o descendiente solamente de ellos.
La Banda Oriental fue un territorio ubicado al este del río Uruguay y al norte del Río de la Plata, sobre la costa atlántica de Sudamérica. Abarcaba una zona que se corresponde en forma aproximada con la actual República Oriental del Uruguay y el actual estado brasileño de Río Grande del Sur.
La Junta Grande o junta de Buenos Aires fue el gobierno ejecutivo que se creó en las Provincias Unidas del Río de la Plata el 18 de diciembre de 1810 a partir de la Primera Junta, con la incorporación de los diputados provenientes de las provincias que integraron el ex Virreinato del Río de la Plata. Gobernó hasta el 22 de septiembre de 1811, cuando fue reemplazada por un golpe institucional encabezado por el Cabildo de Buenos Aires que llevó al gobierno al Primer Triunvirato, que volvería a las tendencias centralistas de la Primera Junta.
ANTECEDENTES
Luego de producirse la Revolución de Mayo en Buenos Aires en 1810, la parte de la Banda Oriental dependiente de la Gobernación de Montevideo permaneció fiel al gobierno español, mientras que el resto del territorio adhirió a la Primera Junta.
A principios de 1811 solo la villa de Belén permanecía en obediencia de Buenos Aires, pues el resto del territorio oriental fue obligado a obedecer a las autoridades realistas que trasladaron su base regional a Montevideo. Sin embargo, entre la población, fundamentalmente de la campaña, comenzó a generarse un movimiento de opinión favorable al movimiento revolucionario.
Revolución de Mayo | ||
---|---|---|
La Revolución de Mayo por Francisco Fortuny | ||
Contexto del acontecimiento | ||
Fecha | 25 de mayo de 1810 | |
Sitio | Virreinato del Río de la Plata | |
Impulsores | Antonio Luis Beruti Cornelio Saavedra Juan José Castelli Juan José Paso Manuel Belgrano Mariano Moreno Nicolás Rodríguez Peña Hipólito Vieytes Martín Rodríguez Juan José Viamonte Eustoquio Díaz Vélez Domingo French | |
Motivos | Abdicaciones de Bayona, Invasiones Inglesas | |
Influencias ideológicas de los impulsores | Liberalismo ycontractualismo | |
Gobierno previo | ||
Gobernante | Baltasar Hidalgo de Cisneros | |
Forma de gobierno | Virreinato | |
Gobierno resultante | ||
Gobernante | Primera Junta | |
Forma de gobierno | Junta de gobierno |
En enero de 1811 Francisco Javier de Elío volvió a Montevideo desde España con el título de virrey del Río de la Plata. Desde ese momento inició los preparativos para declarar la guerra a la Junta de Buenos Aires, lo que hizo el 12 de febrero.
Para ello tomó una serie de medidas fiscales que le permitían hacerse de recursos: regularización de títulos de propiedad de tierras para el pago de la contribución, solicitud de donativos patrióticos, impuestos a las importaciones de cuero, tabaco, control del contrabando permitiendo el comercio sólo a buques autorizados y a través de intermediarios nacionales.
Estas medidas perjudicaron a hacendados, comerciantes, barraqueros y navieros en su actividad mercantil, que estaba decayendo por la situación de crisis y el control español del comercio, ya que impedía el comercio con los británicos.
José Gervasio Artigas Arnal
A estas medidas se sumaron empréstitos forzosos al clero, empleados, propietarios, artesanos, hacendados, comerciantes y el uso de la fuerza para coaccionar a los pueblos a reconocer la autoridad española en Montevideo.
José Gervasio Artigas Arnal | ||
---|---|---|
Artigas en la Ciudadela Óleo de Juan Manuel Blanes (1884). | ||
General | ||
Mandos | Ejército Artiguista | |
Participó en | ||
Nacimiento | 19 de junio de 1764 Montevideo, Banda Oriental,Virreinato del Perú | |
Fallecimiento | 23 de septiembre de 1850 (86 años) quinta Ybyray de Asunción,Paraguay |
En consecuencia, algunos jefes militares al servicio del gobierno español, pero con gran asidero en la campaña oriental, se pasaron al bando revolucionario, como fue el caso de José Artigas el 15 de febrero de 1811, quien abandonó la guarnición realista de Colonia del Sacramento y se puso bajo las órdenes del gobierno de Buenos Aires, que le ordenó retornar a la Banda Oriental con auxilios para los levantamientos en la campaña.
Pedro José Viera | ||
---|---|---|
Coronel | ||
Años de servicio | 1806 - 1844 | |
Apodo | "Perico el Bailarín" | |
Lealtad | República Riograndense | |
Servicio/rama | Independentista riograndense (1835 - 1844) | |
Participó en |
| |
Nacimiento | e/ enero y abril de 1779 Viamão Capitanía de Río Grande del Sur delPrincipado-Virreinato del Brasil (actual Brasil). | |
Fallecimiento | 15 de junio de 1844 Piratiní República Riograndense (actualRepública Federativa del Brasil). |
Pero los preparativos revolucionarios habían comenzado en diciembre de 1810, cuando el alférez Justo Correa fue enterado de la posible presencia de tropas porteñas en el territorio de la Banda Oriental. Inmediatamente dio paso a la convocatoria a desertores y paisanos a levantarse en armas. Desde todos los rincones se movilizaron los hombres, acudiendo al llamado de los caudillos locales.
Museo histórico Nacional.Casa de Rivera
En enero de 1811 Pedro José Viera, conocido como Perico El Bailarín, se sumó al llamado de Correa con veintiocho hombres. En febrero le siguió Venancio Benavides.
El día 24 de febrero llegó la esperada noticia, la declaración de guerra por parte de Buenos Aires. Ya para el 26 los patriotas, ocultos en un bosque sobre el arroyo Asencio en el actual Departamento de Soriano, eran unos trescientos.
EL GRITO DE ASENCIO
El 27 de febrero el contingente de revolucionarios comandado por Pedro José Viera decidió emprender las primeras acciones. Al día siguiente tomaron la cercana población de Mercedes y Santo Domingo Soriano.
Soriano | ||||
---|---|---|---|---|
Departamento de Uruguay | ||||
| ||||
Otros nombres: Departamento fértil | ||||
Ubicación de Departamento de Soriano
Soriano es uno de los 19 departamentos que conforman la República Oriental del Uruguay. Su capital es la ciudad de Mercedes.
|
Con Benavídes al mando de las tropas, los revolucionarios capturaron luego las poblaciones de El Colla, actual Rosario, el 20 de abril y San José, el 25 de abril. El 26 de mayo sitiaron Colonia del Sacramento, que cayó una semana después.
El incipiente movimiento recibiría un fuerte impulso con la incorporación de Artigas, que prontamente se convertiría en el líder de la revolución en la Banda Oriental.
El 27 de febrero el contingente de revolucionarios decidió emprender las primeras acciones. Al día siguiente tomaron las cercanas poblaciones de Mercedes y Santo Domingo de Soriano. En la historia uruguaya quedó el nombre de Grito de Asencio para conmemorar los hechos del 28 de febrero de 1811.
MONUMENTO A LA ADMIRABLE ALARMA
En el Parque Asencio, lugar donde supuestamente se desarrollaron los hechos del 28 de febrero de 1811, se levanta actualmente el monumento a la Admirable Alarma con el escudo de Uruguay y los escudos departamentales de todo el país, hechos en hormigón.
En plena construcción del Monumento de La Admirable Alarma
Monumento de La Admirable Alarma
En ellos hay tierra de cada uno de los departamentos. El lugar se encuentra a unos 10 km de la ciudad de Mercedes.
Monumento de La Admirable Alarma
Escudo de armas de la República Oriental del Uruguay | ||
---|---|---|
Entidad
| ||
República Oriental del Uruguay | ||
Adoptado 26 de octubre de 1908 (versión actual) | ||
Blasón Ovalado y cuartelado, dividido en cuatro de dos colores alternados: azul, y plata. Contiene una balanza, el cerro de Montevideo, un caballo y un buey | ||
Timbre Sol de mayo Tenante | ||
Hojas de laurel rodeando el blasón en la punta atadas con una cinta celeste |
- Volver arriba↑ El grito de Asencio Biblioteca Artiguista.
- Volver arriba↑ 28 de febrero 1811: Grito de Asencio
Desde la noche previa al 28 de febrero de 1811, en la Banda Oriental se comenzó a juntar gente en un punto situado a orillas del arroyo Asencio, afluente del Río Negro.
Acampaban entre el monte lindero y durante la noche se siguió agregando gente venida desde los cuatro vientos. No eran intelectuales ni señoritos de la ciudad. Tampoco eran ricos comerciantes ni abogadillos. Eran gauchos de toda laya y condición, blancos de piel curtida por el sol, negros motudos y mestizos, indios de piel cobriza. Capataces y peonadas, reseros y gauchos matreros, todos convocados para ese 28 de febrero. No había diligencias ni carruajes; era gente de a caballo, bien montados. A las primeras luces del amanecer se comenzó a distinguir en el paisaje esa gente convocada, enfrenando pingos y apretando cinchas. No había galeras ni paraguas, no había cuellos duros ni levitas; había chambergos y vinchas, chiripaces y ponchos raídos, botas de potro o pies descalzos, cuchillos y facones en la cintura, trabucos y sables, boleadoras de piedra retobadas en cuero y tijeras enastadas en cañas o varas flexibles de membrillo o guayabo.
Un revolear de ponchos y chambergos le da la bienvenida a un recién llegado, un paisano grandote llamado Pedro José Viera, oriundo de Porto Alegre, capataz de una estancia cercana a Capilla Nueva Mercedes y uno de los promotores de la convocatoria. Un hombre de trabajo rudo, capaz de cortar una discusión a lazazos o de animar un baile: lo apodaban “Perico el Bailarín”.
Para recibir al recién llegado se adelantó Venancio Benavidez, un cabo de milicias que había conocido hasta la prisión de Montevideo.
Apenas cruzaron unas palabras y sin apearse, se estrecharon las manos rusticas. Se hizo un gran silencio, y Viera arengó a los presentes con un leguaje sencillo y rústico, hablándole de libertad y de la tiranía de los “godos”. Los presentes conocían bien las injusticias y fatigas, y bastaron pocas palabras para levantar el clamor de voces de los presentes y un revuelo de ponchos y lanzas, al grito de “¡Compañeros paisanos, adelante!”. Era la campaña que se levantaba contra las injusticias de la oligarquía montevideana resguardada por el fuerte; era la Patria misma que espontáneamente se sublevaba con un grito de Libertad.
Lo que sucedió luego en toda la campaña fue como un acto reflejo. En forma casi unánime y espontánea toda la campaña se plegó a la rebelión: peonadas, curas de campaña, desertores, pulperos saqueados, el indio y los mestizos parias en su tierra, estancieros ricos rebelados contra las medidas monopolistas de godos y comerciantes de Montevideo. La gente de campaña se adhería a la voz de caudillos de distintos puntos y nacionalidades: el español Redruello con los hacendados brasileños Julián Laguna y Manuel Pintos Carneiro levantaban la lejana Belén; el santiagueño Blas Basualdo, conocido como “Blasito” lo hacía en el Lunarejo; los paraguayos Ojeda, Baltasar y Pancho, unos indios callados que conocían el campo por el olor del pasto, en Tacuarembó; los hermanos Vargas en Arroyo Grande; Félix Rivera (hermano de Fructuoso) en Durazno; Manuel Francisco Artigas (hermano de José Artigas, el caudillo oriental) Casupá; el cura Valentín Gómez y los hacendados García Zúñiga y Márquez en Canelones; en el Este los distritos de Cerro Largo, Minas y Maldonado se plegaban a la insurrección general. A Francisco Delgado y sus peonadas de les unió el comandante español Joaquín de Paz y marcharon al encuentro del estanciero minuano Bustamante, y juntos marchaban a encontrarse con los Artigas de Sauce y Casupá. En el Sur, el cura Figueredo del Pintado, el teniente de húsares Andrés Latorre, los hermanos Jerónimo y Felipe Duarte, el industrial Joaquín Suárez, los hermanos Tejera, el valeroso mulato José Antonio Verdún. Más al Este, sobre Maldonado reúne gentes el joven hacendado Juan Antonio Lavalleja.
Cercano a Montevideo los hermanos Bauzá equipan una columna de su propio peculio, con la colaboración del terrateniente Tomás García de Zúñiga, el hacendado ramón Márquez y los hermanos Vázquez. Y en las propias narices de virrey, Fernando Ortogués, capataz de las estancias del Rey a las puertas de Montevideo, azuza al paisanaje. Hombres de toda clase y condición se unían al movimiento artiguista y la mayoría de ellos serían luego oficiales de destacada actuación.
En apenas un mes se había levantado prácticamente toda la campaña. Las guarniciones españolas de los pueblos, diezmadas por las deserciones se entregaban sin resistencia; la guarnición de Capilla Nueva Mercedes fue ocupada el 28 de febrero, y el mismo día por la tarde Pedro viera toma Santo Domingo de Soriano.
Grito de Asencio. Banda Oriental del Uruguay. Por Leonado Castagnino
https://www.youtube.com/watch?v=A1n-FbzPgTE
Leonardo Castagnino
Copyright © La Gazeta Federal
Funtes:
- Obras citadas.
- Periódico El Restaurador N° 21. Dic. 2011
- La Gazeta Federal www.lagazeta.com.ar
Fuente:
https://es.wikipedia.org/wiki/Grito_de_Asencio
No hay comentarios.:
Publicar un comentario